Antes de hacer la crónica de este día emblemático para el Pueblo español, vamos a hacer una pequeña presentación de VOLVEMOS para nuestros nuevos lectores que nos hayan conocido ayer por primera vez:
Volvemos es una cura de desintoxicación del Pueblo español, de tantísimas mentiras que se le han contado en estos 40 años. Volvemos es una intervención quirúrgica para extirpar de la mente de los españoles el cáncer de España que la está matando: el antifranquismo, que le lleva renegar de su historia más gloriosa, de “el milagro español”, como lo llamaba el mundo.
Volvemos es también una terapia nacional para librar a España de sus miedos, de sus delirios y de sus patologías, y para ayudarla a identificar la VERDADERA causa de sus males… y eliminarla.
Volvemos quiere abrir un tiempo de reflexión para el Pueblo español para que se dé cuenta de dónde está verdaderamente su enemigo, interno y externo, y no se deje engañar de nuevo por cantos de sirena que le aboquen de nuevo a los acantilados de otro baño de sangre.
Y a continuación pasamos a esbozar una CRÓNICA de los hechos acaecidos en varias ciudades de España en el 40 aniversario de la muerte de Franco, con motivo de nuestra campaña de VERDAD histórica.
En primer lugar, ofrecemos el folleto repartido ese día en toda España, con miles de ejemplares (5.000 sólo en Madrid):
Y también éste, que se lee mejor:
La campaña se ha realizado en las redes sociales y con reparto de folletos en Madrid, Boadilla, Valencia, Cádiz, Albacete y Lugo, y hoy se hará también en Granada, con una caravana patriótica. En Madrid hemos estado todo el día circulando por la ciudad en un coche con el cartel de la campaña y la bandera del águila imperial

A ratos parábamos en lugares transitados, como el Corte Inglés de la C/ Goya, para repartir folletos a los transeúntes y transmitirles nuestro mensaje por megafonía

Este era uno de los textos leídos por megafonía:
En la España del Caudillo prácticamente se podía hablar de pleno empleo. En la España de Franco hubiera sido impensable ceder la soberanía nacional a los poderes económicos de la Unión Europea.
En la España de Franco las bravatas de separatistas vascos y catalanes habrían sonado a chiste y, de haberse producido, habrían tenido una respuesta, según Ley, contundente e inmediata por parte del Estado Español.
En la España de Franco se construyó la Seguridad Social, la sanidad y la educación públicas y una Administración de Justicia para todos los españoles, sin las tasas brutales que se acaba de sacarse de la manga, para sangrar más aún el bolsillo de los españoles, el ministro del PP, Ruiz-Gallardón.
En la España de Franco el Banco de España habría impedido que los bancos robaran a los españoles y que las cajas de ahorro se arruinaran a sí mismas y arruinaran a España.
En la España de Franco se terminó con la pobreza de siglos del pueblo español.
En la España de Franco la corrupción se consideraba una cuestión de honor para el Estado y cuando se producía se perseguía, se castigaba y no se miraba para otro lado.
En la España de Franco se nos colocó como novena potencia industrial del mundo, partiendo prácticamente de la nada, a base de la creación de una economía productiva dirigida desde el Estado.
En la España de Franco se realizó la mayor revolución moral, política, económica y social de la historia de España.
Porque la España de Franco nos puso en la modernidad. Porque la España de Franco supo elevar el nivel de vida de todo el pueblo español. Porque la España de Franco generó una importantísima clase media que hoy terminarán por empobrecer y proletarizar. Porque la España de Franco creó una sociedad infinitamente más justa y mejor que en la que vivimos.
Franco construyó una España nueva en 37 años de gobierno, la misma España que 37 años de democracia después han destrozado, hasta convertirla prácticamente en un solar.
A pesar de la Ley de Memoria Histórica, a pesar de la manipulación del pasado, a pesar de los renegados y traidores a su trayectoria, a sus familias, a su bandera y a sus juramentos, Franco y su obra siguen entre nosotros, siguen vivos a través de los logros alcanzados bajo su dirección y gobierno. La clase media, los hospitales, los pantanos, la educación pública, el seguro de desempleo, la Seguridad Social, la Unidad de España, y otros muchos privilegios de nuestra
sociedad, especialmente la reconciliación entre españoles, la existencia de la Iglesia Católica, la Democracia y la Monarquía, son herencia de su gobierno, de su voluntad y de sus profundos sentimientos patrióticos y católicos, puestos al servicio de España.
Su figura se agiganta con el paso del tiempo, pues quienes tratan de enturbiar el pasado con mentiras se presentan, ante la historia, como auténticos enanos.
A nuestro paso por la C/ Alcalá, obsequiamos a los viandantes con unos de nuestros más valiosos patrimonios: el HIMNO NACIONAL CON LA LETRA DE PEMÁN, que rápidamente los agentes de la autoridad vinieron a prohibir. La gente, sorprendida, sonreía, y algunos alzaban el brazo a nuestro paso y les dábamos folletos para repartir a su vez. La policía nos informó de que necesitábamos PERMISO o una LICENCIA (previo pago, claro), y que esa era LA LEY. Cuando yo le repliqué que era una ley represora y que en tiempos de Franco no estaba prohibido el uso de megafonía, me dijo, con sorna, que hiciéramos un partido para cambiar la ley. Lo que no sabía, cuando le informé, es que el Sistema ya no permite que puedan concurrir a las elecciones partidos que puedan amenazar su hegemonía, tras la ley de 2011 que exige a los nuevos partidos presentar un número desorbitado de avales para poder concurrir (ver reflexiones sobre el tema, más abajo).
Otros agentes del orden también nos intentaron convencer de que nuestra bandera era preconstitucional e ilegal, a lo que respondimos mostrándoles el Preámbulo de la Constitución encabezado por el águila imperial y la reciente sentencia judicial que nos amparaba. En este marasmo de leyes y ordenanzas, ni los mismos agentes conocen la ley que deben representar. A todos ellos y a nuestros lectores les informamos de que la bandera del águila NO ES ILEGAL sino que simplemente NO ES LA OFICIAL, por lo que no está permitido ondearla en lugares oficiales. Nada más.
La respuesta del público a nuestra campaña fue muy alentadora en algunos casos, y en otros, muy representativa de la España creada por esta democracia, que ni sabe ni contesta ni se interesa por nada que no sea su condumio y su ombligo; una España cerrada al diálogo social y a la información…. muy diferente de la España que les legamos en 1975 y por lo que pudieron llegar al Poder.
Nuestro paso por la ciudad ha suscitado gran entusiasmo en personas como el camarero que salió corriendo de su bar al vernos para pedirnos información, en los que nos apoyaban desde sus coches y nos saludaban desde las aceras, en el niño que gritó VIVA ESPAÑA al vernos pasar, en los mayores que nos contaban sus recuerdos del Frente de Juventudes… etc. etc. A muchos les dábamos folletos para repartir a su vez.
Por contra también ha suscitado la mayor intolerancia y agresividad (muy antidemocrática) en la estudiante pija que nos llamó «fascistas de mierda» camino de la Complutense (nido de rojos), en el inglés que nos intentó agredir al grito de «nazis de mierda» (parecía endemoniado), del taxista que también nos confundió con nazis, producto de la propaganda del Sistema y rebatido por el académico historiador Luis Suárez en su último libro. La mayoría de los que nos insultaban con verdadero odio eran muy jóvenes, que no habían conocido el tiempo de Franco más que a través de la propaganda del Sistema. Aunque también tuvimos que escuchar de algunos mayores barbaridades como que España siempre había estado igual de mal que ahora y que Franco se había dedicado a vender tierras españolas a otros países y a construir puentes con el dinero que robaba a los españoles ¡¡!! ¡Que triste constatar la patología nacional que nos ha traído esta democracia! 😦
Sin embargo, en 8 horas de dar vueltas por todo Madrid y bajarnos del coche a dar nuestros folletos, sólo recibimos insultos por unas 6 o 7 personas. No es tan fiero el león como lo pintan, pero el Sistema ha conseguido crear un clima de MIEDO a decir la verdad sobre el franquismo, que reprime a la población subliminalmente y con noticias como ésta, que seguramente serán archivadas pero que crean alarma social. Si no, seríamos legión los que habriamos salido ayer a la calle.

Aparte de nuestra campaña, Franco ha estado presente en la Red y en los medios, más que nunca, también por parte de extranjeros (de fuera vendrán que tu historia te enseñarán!) como este artículo de Caponnetto.
PD. Hemos visto que el inglés endemoniado era nada menos que Paul Preston! Cosa de Franco, seguro, que tenía mucho sentido del humor, porque no puede ser casualidad… con lo grande que es Madrid y lo largo que es el día! (y el mundo, porque este tipo es extranjero) … coincidir precisamente con él en el día de nuestra campaña… Casi le da un infarto al tío cuando vio la cara de Franco! Si llegamos a ser hombres, nos pega, y siendo mujeres, poco le faltó.
Reflexiones al hilo de la campaña de Madrid:
Alardeando de buena educación y de cinismo, un guardia urbano me instó a crear un partido político para cambiar las leyes si no me gustaban. Lo que no sabía ese agente del orden tan “educado”, cuando se lo expliqué, es que el régimen al que sirve con tanto celo como ignorancia ha vaciado la democracia de sentido y ya no se permite concurrir a las elecciones a los partidos políticos que le puedan hacer frente. Con el beneplácito del Tribunal Constitucional (TC), el contubernio PP/PSOE cambió la ley electoral en 2011 para exigir a los partidos sin representación un número desorbitado de avales para poder presentarse a las elecciones…. un 25% de los apoyos/votos necesarios, ANTES de hacer campaña electoral!
Pues éste es un régimen represor… de guante blanco. Quita sus derechos a los ciudadanos, pero con mucha “educación” y “por su bien”. Produce infinidad de leyes que no son conocidas por los ciudadanos, igual que en tiempos de los fariseos y para justificar los pingües sueldos de los legisladores; pero leyes que les son preceptivas e imputables al ciudadano. Y así crea una atmósfera de miedo difuso a la autoridad y a las constantes sanciones. Los derechos requieren, en este “régimen de libertades”, del pago de una licencia, que cuesta DINERO, que va a las arcas del estado… y de sus dirigentes, claro, porque “el dinero público no es de nadie” (… más que nuestro! ), en palabras de la exministra socialista Carmen Calvo.
En este régimen represor el dinero lo compra todo; con suficiente dinero la ley no se le aplica, y con suficientes favores no le es imputable. Este régimen corruptor obliga a los ciudadanos a someterse y venderse para poder sobrevivir. En este régimen todo se compra y se vende, empezando por los derechos “constitucionales”.
En el régimen de Franco, por el contrario, había pocas leyes y eran bien conocidas por los ciudadanos. Eran leyes justas y servían realmente para su bien, no para el bien de los poderosos, porque el gobierno estaba al servicio del Pueblo, y no viceversa, como en la actualidad. Y ese régimen dio al Pueblo español la mayor paz social, prosperidad , unidad y verdadera libertad de toda su historia. Por eso queremos VOLVER a recuperar esa España que nos han robado.
Y todo parte de la Constitución de 1978, elaborada fraudulentamente por obra de un perjurio real, que deja en manos de un tribunal su interpretación futura y su VIOLACIÓN. Así, el TC ha pasado a ser el artífice del Derecho en España, y a ser una instancia politizada, en manos de la élite política de un signo u otro… que resulta ser el mismo. Y así, el Estado se ha convertido en reo de un partido o de una élite ideológica, que es lo mismo, y eso tiene un nombre: TOTALITARISMO. Así pues no encontramos sometidos a una “democracia” TOTALITARIA, donde la élite nos marca hasta nuestra vida privada… y la de nuestros hijos, que es peor.
Porque este régimen es una farsa y un fraude de principio a fin… bien disimulado tras palabras rimbombantes y promesas falsas. Este régimen PATERNALISTA no permite al Pueblo ejercer los derechos que le vende, SIN SU PERMISO. En esta democracia para todo hay que pedir permiso: para usar un megáfono, para manifestarse, para decir lo que se piensa de ciertos temas, para poner nombre a un club de fútbol, etc. etc. etc. Y ese permiso depende de la voluntad de los que lo conceden, no de la ley. La seguridad jurídica ha desaparecido por arte de magia y de la politización de la vida pública y de la Justicia. Y a cambio nos han devuelto a la ley del embudo, pues para algunos no hay necesidad de permisos para tomar la Puerta del Sol o las calles, sin permiso. Y nos han instalado en un régimen de PRIVILEGIOS para la élite del Poder y sus acólitos, de diverso pelaje y caretas.
¡Qué pena de España!